CURSO DE ORATORIA INTEGRAL

Precio: 20€
Formato: 2 vídeos con una duración total de 2h 17min

Comprar curso: cursos@felixrodrigomora.org

La finalidad del Curso es instruir para realizar alocuciones e intervenciones verbales públicas con creatividad, serenidad, eficacia y elegancia.

Se dirige a las personas que deseen mejorar sus capacidades de transmisión oral, profesores y enseñantes, creativos y comerciales, conferenciantes y charlistas, activistas sociales, youtubers, periodistas y tertulianos, interesados en la teoría y la práctica de la comunicación, quienes pretendan ser mejores conversadores, aquellos que quieran ampliar su vida relacional por el uso renovado de la palabra, etc.

Es impartido por Félix Rodrigo Mora, con unos 600 actos oratorios en los últimos diez años, en torno a 350 videos editados, unos cientos de audios, 31 libros publicados como autor, coautor o prologuista, más de 400 artículos, activista social e ideólogo de la autoconstrucción del yo. Lo decisivo en él es el amor pasional por la palabra y el lenguaje.

Se compone de dos partes, cada una de ellas de una hora, aproximadamente, de duración, con siete apartados una y otra.

 

TEMARIO

Parte Primera

La meta es conseguir una oratoria integral, popular y épica individualizada. El método es indirecto, formar al orador para que éste realice con eficacia cada alocución. Así pues, los nueve atributos básicos de la sapiencia retórica que ofrece el Curso son: integral, pasional, desde los fundamentos del lenguaje, indirecta, intuitiva, con atención a las microtécnicas del hablar, popular, particularizado, en la lengua materna.

  1. Examen de la sociedad de las multitudes mudas y del sujeto áfono. Atomización social, colapso de la actividad relacional y de los vínculos afectivos, en consecuencia, decadencia del hablar, desde la oratoria política a la charla informal y el lenguaje de alcoba. Monopolización de la palabra por minorías privilegiadas: políticos, expertos, agentes mediáticos y otros. Derecho de voto sin derecho de voz. Tal estilo de vida ocasiona dos patologías verbales, el temor a explicarse en público (lo padece el 80%) y la torpeza antinatural en el manejo del idioma.
  2. Si la oratoria es una habilidad humana innata, en la actualidad sepultada en cada uno y cada una por una densa capa de imposibilidades, malos hábitos y no usos, el método lógico para el aprendizaje del bien hablar cívico estriba en liberar al individuo de tales servidumbres y cargas, con el fin de que emerja el orador primigenio que hay dentro de él.
  3. Creación y aniquilación de las lenguas. El nacimiento del idioma castellano. ¿Por qué hoy hay miles de lenguas en destrucción, de las 6.200 que existían a principios de siglo, y ninguna en construcción? Un apunte rápido sobre el inglés neolengua y los seres nada ¿Vamos hacia una sociedad de robots parlantes en un idioma artificial? Si es el lenguaje lo que principalmente nos hace humanos, como especie en la historia y como individuos día a día, ¿cuál es el futuro?
  4. Oralidad y libertad política, oralidad y libertad civil, oralidad y libertad de conciencia. Lenguaje hablado y lenguaje escrito, ¿qué es, en realidad, la escritura? El aprendizaje a hablar y el aprendizaje a escribir, la sociedad familiar-civil y la escuela institución estatal. Primacía de lo oral sobre lo visual, refutación de las teorías sobre “la sociedad de la imagen”. La oralidad popular es consecuencia y causa de la libertad, y fundamento de la democracia directa.
  5. Pensamiento objetivo y oratoria eficaz. La belleza de la verdad, el goce de conocerla y el lenguaje público eficaz. Los diez principios que ponen la epistemología al servicio de la oratoria, extraídos de la teoría del conocimiento y la filosofía moral. Producir y crear con ellos el contenido en bruto del acto comunicativo singular. Pues no es posible hablar bien sin pensar bien.
  6. Transformar y organizar los contenidos alcanzados con las herramientas del punto anterior, hasta convertirlos en una narración, que es lo a exponer en el acto oratorio. Tras haber obrado como investigador y pensador hay que hacerlo a continuación como narrador y cuentacuentos. Los cinco principios que rigen la tarea de estructurar y organizar los contenidos.
  7. Construcción y autoconstrucción del individuo total, por tanto, también comunicador y orador. El deber cívico de tomar la palabra como soporte mental del esfuerzo autoconstructivo para recuperar la soltura en el decir. Deberes y derechos, primacía de los primeros. Aprendizaje guiado del procedimiento, según está explicado en mi trabajo “El yo y la ética”, incluido en el libro colectivo “Ética y revolución integral”, para la modificación de los estados de ánimo y la conducta individual por la intervención propia. Tratamiento, con ello, del temor a hablar y decir en público, así como de la infravaloración en las tareas oratorias.

 

Parte Segunda

1.Estudio de los clásicos, antiguos y actuales, del arte oratorio. Entre estos últimos, “Tratado de la argumentación. La nueva retórica”, de Ch. Perelman y L. Olbrechts-Tyteca, “No pienses en un elefante. Lenguaje y debate político”. G. Lakoff, “El imperio retórico”, Ch. Perelman y “El arte de tener siempre razón”, de A. Schopenhauer. Reflexión sobre la débil creatividad de nuestra sociedad (aquéllos son comentarios a los clásicos antiguos, sobre todo a Aristóteles, mera escolástica). Su valor formativo es escaso… Decadencia de la oratoria en la contemporaneidad y la contemporaneidad como decadencia.

  1. Examen de los manuales del tipo “Cómo hablar en público”, con muchas docenas de consejos, recomendaciones y trucos, un revoltijo de muy baja efectividad, salvo como placebo, quizá. Videos y cursos, ídem. ¿Para qué todo esto en una sociedad sin oradores, donde los emisores públicos son lectores de textos mediocres escritos por otros? El mitin político expresión señera de lo que no debe ser la oratoria, en lo lingüístico, moral, relacional, estético y político.
  2. Aristóteles, Cicerón, Quintiliano, Plutarco (en “Vidas paralelas”, el capítulo “Demóstenes y Cicerón”, de interés práctico) y Longino. Comentario positivo a la obra de Filostrato “Vida de los sofistas”. Análisis crítico de los cinco momentos de la preparación, formación y realización del acto oratorio que proponen Cicerón y Quintiliano, en latín, “inventio”, “dispositio”, “actio”, “memoria” y “elocutio”, Elogio y negación de Longino en “De lo sublime”, reafirmando la noción de retórica integral efectuada por un ser humano no especializado, no mutilado. Examen del estilo y procedimientos verbales del tenido por el gran orador de nuestro siglo XIX, Emilio Castelar, considerando lo negativo y positivo de su sistema. Un comentario al sistema oratorio de los youtubers. Análisis del caso X, un pésimo orador que expulsaba a su público de la sala, por incumplir todas las reglas de la elocuencia retórica.
  3. La oratoria popular. Critica del desinterés de griegos y romanos por ella. No arengaron a los suyos del mismo modo Espartaco que Licinio Craso, su vencedor. Rasgos definitorios del modo de hablar y decir propios del pueblo llano. El concejo abierto como foro popular, lugar y espacio para la oratoria libre, razonada y bella. Devolver la palabra a la gente del común para constituir un sistema de autogobierno sustentado en la oralidad épica, reflexionada y poética, lo que resolvería los actuales problemas con el lenguaje y del lenguaje. Estudio de una muestra concreta de eficacia expresiva popular colosal, los chistes contra Franco y el franquismo.
  4. El acto comunicativo en sí. Estudio de lo que debe hacerse cuando llega el momento de subir al estrado, en once recomendaciones. Dentro de ellas es previa la elección del modo de comunicar, entre cuatro sistemas posibles. Exponer y persuadir, aspectos morales (ligados a la libertad de conciencia) y de eficacia contenidos en esta cuestión. Técnicas y procedimientos. Lo intuitivo. Las habilidades concretas. La conexión visual con el público. El coloquio. Las agresiones, verbales y, a veces, físicas. El post-acto.
  5. Exhortación última y conclusión: formular una estratega o plan de actuación personal para mejorar o construir la propia capacidad expositiva, asunto en íntima relación con el punto 7 de la parte primera. Centralidad absoluta, en ello, de la voluntad, de la audacia y el atreverse, para aprender haciendo, yendo de menos a más. Ejercicios y tareas de preparación.
  6. Despedida.